jueves, 30 de junio de 2016

"La Plaza". El Mercado de Abastos de Pozoblanco


Nací enfrente de "La Plaza". Porque en Pozoblanco nadie iba a comprar al Mercado, sino a La Plaza. Mi calle, la que rodea este edificio, nunca ha tenido nada de plaza, pero se llamaba "Plaza". Primero, "de José Solís", para cambiar su nombre, tras eliminar a ministros franquistas del callejero, por la actual denominación de "Plaza del Mercado". Quizá porque en Pozoblanco nunca tuvimos una plaza digna de ese nombre.

"La Plaza" fue el indiscutible centro comercial de la comarca de Los Pedroches durante décadas. Y al igual que en tiempos podía utilizarse como símbolo del auge comercial de Pozoblanco, desde hace ya años ejemplifica perfectamente la crisis del comercio tarugo, especialmente en el centro histórico. Lo que hay, va irremediablemente hacia el norte, hacia "La Salchi". La especulación urbanística, que también existe en nuestros pueblos, tiene mucho que ver con estos cambios.

Ante esta situación, caben dos soluciones: aceptar la evolución, y dejar que el centro muera poco a poco en beneficio de los nuevos barrios comerciales y residenciales, o actuar para revitalizar el centro. En mi caso, opto claramente por la segunda opción. Por eso durante la legislatura en la que he sido concejal en el Ayuntamiento de Pozoblanco, nuestro grupo apostó por la reforma del Mercado de Abastos y la paulatina peatonalización del centro urbano. Para revitalizar una tradicional arteria comercial que, desde "La Plaza", subía por la "Calle del Toro". Llegando, justo, hasta donde hoy comienza el verdadero centro comercial de Pozoblanco. Por esta misma razón me he mostrado muy crítico con la pretensión del actual gobierno de Pozoblanco (PE+, que es un grupo "independiente" liderado por el actual alcalde, que ya llevaba 14 años como concejal cuando se presentó a las elecciones con una "agrupación de electores", aliado con el PP) de permitir la instalación de una gran superficie comercial al norte de la población.

Ejemplos de planificación urbanística para revitalizar el centro hay muchos. Los que yo conozco pasan todos por la creación de áreas de preferencia peatonal. La propia configuración de nuestras ciudades y pueblos así parece exigirlo: el centro de calles estrechas y enrevesadas para el peatón, las modernas afueras con sus avenidas para los coches. ¿Por qué, entonces, pensar en un enorme aparcamiento subterráneo en La Plaza, derribando un edificio protegido para intensificar el tráfico por el centro?

Ya he reconocido que estamos hablando de un espacio que siento muy cercano. Y tengo que reconocer también que el absoluto desprecio por el Patrimonio Histórico que se deduce del planteamiento de una encuesta realizada por el ayuntamiento de Pozoblanco, y que destaca un buen artículo de Solienses, me toca en lo profesional. Por eso, no puedo callarme algunas opiniones.

1. El gran y necesario aparcamiento. Sería necesario si quisiéramos que pasaran por La Plaza muchos coches pero ¿eso es lo que queremos? En mi opinión, bastaría con un aparcamiento más reducido, que permitiera cargar la compra en el coche. Y, por supuesto, no tendría por qué ser subterráneo (para hacerlo tenemos que romper un enorme bloque de granito). ¿No podemos hacer en el centro aparcamientos en altura? En mi época de concejal, esta pregunta nunca fue contestada, pero tanto técnicos como políticos la rechazaban inmediatamente como inviable. No sé por qué.

2. Revitalizar el centro comercial histórico con aparcamientos, apostando por los coches. Bien. Es una opinión, tan válida como la mía (que es la contraria). Pero quien la defienda, por favor, que dé la cara, que nos explique los pros y los contras.

3. La encuesta. Ahí me han tocado, la verdad. ¿Harán una encuesta para decidir qué tipo de bisturí utilizarán los cirujanos en el Hospital de Los Pedroches? ¿O para decidir qué dimensiones tienen que tener los pilares que soporten el nuevo edificio de La Plaza? Es decir: sólo gentes que muestren un desprecio absoluto por la conservación del Patrimonio Histórico pueden trasladar a una encuesta la eliminación de la protección del edificio.


Remodelación integral del mercado con la protección estructural que a día de hoy tiene y que implica dejar toda la fachada exterior igual que está. Inversión aproximada: 2,4 millones de Euros.

Eliminar la protección estructural existente y recuperar un espacio público para la ciudadanía. Esa recuperación conllevaría utilizar todo el espacio para la construcción de aparcamientos subterráneos en toda la superficie de la plaza del mercado y en superficie un mercado adaptado a las necesidades de hoy en día y el resto de espacio sería una plaza pública abierta. Inversión aproximada: un 30% más que la Opción 1.

Por otra parte, a la opción 2 sólo le falta añadir una frase final: "Que es la opción más buena y más mejor de todas".

4. El Patrimonio Histórico. Varias veces he dicho por aquí qué entiendo por Patrimonio Histórico. Unas ideas que un anónimo comentarista en Solienses puede echar por tierra con todo el peso de "su cultura": "La casa de mis abuelos tenia más de cien años, la tiré, la hice nueva, y no paso nada, bueno si paso una cosa, que la calle quedó más bonita."

5. Los profesionales del Patrimonio Histórico. Se va a decidir si se elimina la protección al edificio del Mercado sin estudios de sus valores patrimoniales y sin intervención alguna de historiadores, historiadores del arte, urbanistas... Podría haber ayudado el estudio y la búsqueda de asesoramiento por parte de una oficina de Patrimonio Histórico que ya no funciona en nuestro Ayuntamiento (si has leído hasta aquí, te podrás hacer una idea de por qué la han eliminado). Pero no. Proteger o no este edificio se va a hacer ¡Por votación popular! Sólo puedo responder a voz en grito "¡Olé! ¡Coño!".

[¿Qué pienso yo? No tengo totalmente claro si es necesario conservar o no este edificio, porque necesitaría recoger más información, y más opiniones técnicas de historiadores, de historiadores del arte, de especialistas en urbanismo... Lo que sí tengo claro es que si yo, que por mi profesión tengo una cierta capacidad de análisis, no puedo definir en este momento mi postura, someter la decisión a una encuesta defendiendo que así se fomenta la participación ciudadana es una auténtica barbaridad.]


10 comentarios:

Anónimo dijo...

En primer lugar agradecería que se tratara de argumentar una u otra postura si el "apunte" político o referencia a la anterior legislatura. Más que nada, por no mezclar y sobre todo, no desvirtuar el debate.

1. ¿Cuantas plazas estimas que debería de tener el aparcamiento? Será una cuestión que definirá el proyecto en cuestión. Que existan plazas de aparcamiento no quiere decir que se intesifique el tráfico. Son plazas que también pueden resolver las demandas de los vecinos de la zona. A la pregunta de hacer bloques de aparcamiento en altura, perfecto, también son necesarios. Sin embargo, le invito a que trata de alojar 30 coches en un bloque de tres plantas. Probablemente se alarme al comprobar la enorme cantidad de suelo que necesita (menor que si se trata de una sola planta, lógicamente, pero igualmente alta).
En su época de concejal, podían haberse esforzado en encontrar una respuesta realizable. Sin embargo, o no pudieron o no quisieron o ambas cosas.

2. La revitalización del centro se realizaría con la construcción de una gran plaza. Que además, contaría con un mercado de un tamaño y funcionalidad acorde a las necesidades y de un aparcamiento subterráneo. Pero no se olvide, el interés de la operación está poder plantear una gran plaza en un lugar estratégico del casco antiguo, en una zona que necesita urgentemente la revitalización. Operación, que podría competir sin lugar a dudas con la zona norte y equilibrar los desarrollos de la localidad. Operación, que tendría la capacidad por sí misma en potenciar el desarrollo del casco antiguo.

3. Vamos a explicar las cosas correctamente. No se plantea una eliminación gratuita. Las ventajas de la misma están en poder conseguir un espacio urbano de calidad en el centro, espacio del que adolece la población y que es totalmente necesario. Le recuerdo, que no se plantea una operación con carácter especulativo, como si se hiciera (bajo el auspicio socialista) en el campo de fútbol Virgen de Luna.

4. El patrimonio es muy importante. Pero la conservación mal entendida provoca estragos. Como ejemplo cercano, la situación que viven los vecinos de Dos Torres gracias a la excesiva protección, donde el casco urbano se está muriendo. Y por cierto, las estructuras urbanas también son patrimonio histórico y también necesitan renovarse y actualizarse. En este caso, tengo claro que no puede pesar más la conservación que la renovación de un área urbana completamente deprimida.

5. Los profesionales del patrimonio o al menos algunos de ellos, ya han emitido su opinión. Es curioso que comente el estudio de los valores del edificio, cuando se ha hecho tan poco en esa línea durante los últimos 4 años en la oficina de patrimonio. Donde apenas se ha profundizado en el conocimiento del patrimonio arquitectónico de la ciudad. Y lo poco que se ha hecho, encima ha sido gracias al apoyo de profesionales independientes.

6. La rehabilitación del edificio puede mejorar las condiciones del edifico. Pero difícilmente actuará con profundidad sobre los problemas de la zona. En cualquier caso se trataría de una inversión que mantendría el estatus actual de un contexto urbano muy deprimido.

En fin, tratemos de entender las posibilidades de ambas opciones, en lugar de negar automáticamente la mayor o referirse a la "virtud" de los tiempos pasados.


Juan B. Carpio dijo...

1. Las plazas para residentes... puedes imaginar que me parecen perfectas, porque entre otras cosas yo no tengo cochera. En cuanto a aparcamientos en altura o subterráneos ¿30 coches en 3 plantas en altura es más difícil que 30 coches en tres plantas subterráneas? En fin, seamos un poco serios. Lo que no entiendo es por qué sólo podemos excavar, y no aprovechar alturas. En mi época de concejal... ya lo he dicho: tanto técnicos como políticos no estuvieron de acuerdo conmigo en el tema de los aparcamientos en altura. Y en el proyecto de remodelación del Mercado: primero nos dió el hachazo Diputación, con un espectacular recorte presupuestario para ese proyecto, que lo hizo inviable. Después... pues debate, debate, y sin tiempo ni dinero.

2. La plaza lo salvará todo... Bueno, te voy a reconocer que desde mi ventana ganaría muchíiiiiiiiisimo el barrio. Totalmente. Ahora, de ahí a pensar que una plaza (a la que se llega en coche, supongo) va a ser la gran solución... Pues me suena como a lo de las estaciones de ferrocarril de fines del siglo XIX, la verdad.

3. Ni idea, oye, de lo que dices. La verdad es que parece que lo de "encuestar" sobre un aspecto técnico no parece que te interese comentarlo. Ni lo "dirigido" de las posibles respuestas a la encuesta. Que en la primera opción sólo les falta añadir al final "que se queda como está y está de puñetera pena". El hecho de que no comentes esto me indica que posiblemente estés de acuerdo conmigo, pero que por alguna razón oculta (como oculto queda tu nombre) no puedes reconocerlo ni siquiera desde el anonimato.

4. La conservación de los bienes patrimoniales pasa necesariamente por conocer cuáles son esos valores. Sin estudio serio y riguroso, cualquier cosa que se haga puede ser una mierda. Puede ser una cagada tirar el edificio, pero también puede ser una cagada conservarlo. La teoría de que "no podemos parar el progreso" que se deduce de tus palabras ¿servía también para el Partenón? ¿O para ese puente romano de Córdoba que tanto ha estorbado? Sin estudio, no hay seguridad en la solución. Y lo que planteas es tremendamente peligroso. Entre otras cosas, cuadra poco con la legalidad.

5. Los "profesionales del patrimonio" hacemos informes y los firmamos con nuestros nombres dejando constancia de cuál es nuestra titulación, lo que nos avala para opinar. Y los ciudadanos, para poder tomar una decisión, tendrían que tener una idea de la opinión que historiadores, historiadores del arte, urbanistas y otros especialistas tienen sobre el tema. Como comprenderás, que en un comentario anónimo me digas que han opinado los que tenían que opinar... Pues no me da mucha seguridad, la verdad. Y leyendo los textos de las opciones, lo que me queda claro es que no se ha contado con muchos especialistas.

Veo que conoces lo que se ha hecho en estos cuatro años en la oficina de Patrimonio HIstórico. Y crees que es poco. Bueno, sólo te digo que es la primera vez que ha existido esta oficina como tal. Y, con todos los problemas que conlleva su puesta en marcha, yo creo que cumplió un doble objetivo de empezar a estudiar nuestro patrimonio y ofrecer una experiencia técnica a jóvenes titulados. Por lo que yo sé, la oficina ya no existe. Eso sí que es curioso, que te quejes de que hicieran poco cuando ya está desaparecida la oficina. En fin.

6. Por favor, lee hasta el final. No digo ni siquiera que deba descartarse totalmente la idea del derribo. Lo digo claro: lo que me molesta es que alguien se plantee preguntar en una encuesta sobre algo como esto. ¿Preguntamos también por el grosor de las vigas?

Hacer un estudio y decidir tirar o rehabilitar el edificio es una forma seria de actuar. Pero esto no es serio. Esto es una pantomima que refleja un desprecio total por mi profesión.

Anónimo dijo...

1.- En Pozoblanco, el tipo de parcelario existente hace difícil construir un aparcamiento en superficie con varias plantas de altura. No quiere decir que no haya parcelas adecuadas, sí, pero no son tantas. Sin embargo, una superficie como la del actual mercado, en una sola planta de sótano resolvería lo que tendrían que construir varios edificios en tres. Otro problema del proyecto en altura es que a día de hoy, en Pozoblanco, no es rentable desde el punto de vista de un promotor privado. Esto no quiere decir que no pueda ser una opción, pero dadas la circunstancias solo tendría visos de prosperar si fuera una iniciativa municipal.
Además, el tema del aparcamiento ha de ser una operación integrada de reforma y ordenamiento del tráfico en toda la localidad. Cualquier actuación urbanística funciona por vasos comunicantes y si se plantea actuar en una zona concreta, se debe estudiar su impacto no solo en dicha zona, sino también en aquellas conectadas.

2.- Una plaza es un fenómeno urbano que tiene un impacto medible a diferentes niveles: reduce la densidad de la edificación, aumenta el espacio libre, mejora la calidad urbana de la zona, promueve la intensificación comercial, permite congregaciones sociales de diferente índole, etc. Sí, tiene la capacidad de regenerar contextos urbanos concretos: toma como ejemplos la Alameda o la Encarnación en Sevilla, Bir Rambla en Granada, etc.

3.- Reconozco que la orientación de la encuesta no es la más adecuada. Como sabes, se trata de cuestiones recurrentes en muchas de lo que surge de nuestro ayuntamiento. Sin embargo, abrazar la primera opción y sin pensar en los beneficios de la segunda (que también los tiene), es capcioso.

4.- Estamos de acuerdo en que hay que conocer el edificio. Y es necesario que se realicen esos trabajos de documentación. Y aunque no lo creas, quien te habla se ha tomado la molestia de construir su propio criterio sobre el edificio a partir de su estudio; su origen, sus motivos, su construcción, su morfología, su contextualización. El progreso es bueno o malo según lo entendamos, como todo. El puente romano de Córdoba es un monumento de primer orden mundial, con nada que ver con el edificio en cuestión. Porque por más que nos pese, el único interés patrimonial del edificio tiene que ver con el valor sentimental que se le atribuye. Nada más. Curiosamente, todos lo que le atribuyen dicho valor, compran los fines de semana en Mercadona.

5.- Una titulación ayuda, pero no es suficiente. Como sabes, es necesario un interés y trabajo de investigación previo. A mi me gustaría poder explicar públicamente mi opinión y presentar los estudios y argumentos que la avalan, sin necesidad de esconderme tras un seudónimo. Sin embargo no puedo hacerlo, porque automáticamente dichos argumentos pasarían a un segundo plano y se me calificaría desde una perspectiva política o interesada, invalidando cualquier comentario riguroso sobre el tema en cuestión. Tristemente, esta es la realidad de mi pueblo y dudo que cambie. Desgraciadamente, sabes a que me refiero.

6.- Probablemente la encuesta sea un error, más aun viendo como se ha planteado. Y si no se ha llevado a cabo dicho estudio, ha sido porque siempre se justificaría desde una perspectiva política, aunque fuera un documento riguroso.

El respeto entre profesionales es importante. Has de saber que probablemente seas una de las personas que más respecto dentro de tu disciplina. Pero de igual manera que pides respeto, trata de ponerte en la posición contraria y entender los argumentos que justifican la segunda opción.

Juan B. Carpio dijo...

1. Sobre el aparcamiento en altura... Creo que es debate aparte. Veo que es la opción general, por ejemplo, en muchas zonas de Inglaterra y en otros países europeos, y no sé por qué aquí no. Totalmente de acuerdo en que un aparcamiento, del tipo que sea, requiere una actuación completa en el entorno.

4. Si existe un nivel de protección para un elemento del Patrimonio Histórico, hay que aplicar la normativa que afecta a ese nivel de protección, sin diferenciar si estamos ante un templo romano o una trinchera de la Guerra Civil. Lo contrario, valorar "lo antiguo" nos ha llevado a donde estamos, a un pueblo en el que tenemos poco que conservar, porque ya nos lo hemos cepillado todo. Con mal gusto, además, como puede demostrarse con un simple paseo por Pozoblanco.

5. Una titulación ayuda... siempre que sea una titulación avalada por un Colegio potente. Nadie puede ejercer como médico, dentista... sin título certificado; nadie puede hacer instalaciones eléctricas sin certificado de instalador; nadie va al dentista pensando que no va a cobrarle; nadie llama a un fontanero pensando que se lo haga gratis. Pero hablamos de definir si un elemento concreto posee valores patrimoniales, históricos o artísticos que hagan conveniente su protección y... Ja, ja. Para eso no valen los títulos. Y, por supuesto, contaremos con 13 millones de opiniones e informes pero no habremos pagado ni una sola factura. Historiadores, historiadores del arte, urbanistas, gestores del Patrimonio Histórico... somos gilipollas o vivimos del aire (o ambas cosas).

6. Como sabes, mi "cabreo" es, más que por mi cariño a "La Plaza", por una cuestión profesional. Estoy hasta las narices de que nuestro trabajo esté en la base de muchas cosas, pero jamás se nos reconozca, jamás se nos pague (aclaro: tengo dedicación exclusiva, y mi interés es que, teniendo buenos profesionales en mi campo, puedan vivir de esto). Y, por supuesto, si no firmamos y no cobramos, tampoco se nos puede exigir responsabilidad. Así no se funciona. Que una encuesta pueda decidir qué tipo de protección se da a un edificio me parece una aberración. No me vale que "probablemente la encuesta sea un error": es un método absolutamente inválido para una decisión técnica de este tipo.

Final. ¿Se puede plantear tirar "La Plaza" para hacer "una plaza"? Por supuesto que se puede plantear (ahí estoy de acuerdo contigo, hay que estudiar todas las opciones antes de decidir). Pero requeriría hacerlo de forma correcta, siguiendo los pasos adecuados:
1. Estudiar si es posible y conveniente levantar la protección del edificio. No por encuesta, sino con técnicos competentes y tomando las decisiones por los organismos y según los procedimientos legalmente establecidos.
2. Una vez levantada la protección (en caso de que así sea), se pregunta a la ciudadanía si quieren tirar el edificio o reformarlo.

Con estos argumentos, sí hay segunda opción. Pero la segunda opción planteada en la encuesta no es otra cosa que una aberración, que atenta gravemente contra la profesión que algunos desarrollamos. De la manera que se ha planteado, directamente no es opción.

Juan B. Carpio dijo...

Olvido: desde hace algunos años, en el Ayuntamiento se ha trabajado en un proyecto de reforma del Mercado. Creo que algún pliego de condiciones ya se había publicado, y otros deben de estar a punto de salir, según informó en su momento el propio Ayuntamiento. Ahora, con esta "encuesta", supongo que todo el procedimiento queda paralizado, y en algún momento habrá que empezar desde cero. No creo que en esta legislatura, según veo. Qué pena.

Anónimo dijo...

Si como dices, no tienes clara tu posición en el debate sobre la necesidad o no de conservar el edificio. O la necesidad o no de construir una gran plaza en el centro del pueblo. Bien podrías haberte ahorrado un comentario con tanto sesgo político. Creía que ya no te dedicabas a ello.

Porque no os corresponde a vosotros evaluar vuestro trabajo. Porque aunque tengas razón en algunas de las cuestiones que planteas, el querer justificarlas desde una posición política las descalifica automáticamente. Te lo digo desde el cariño y respeto que tengo por tu trabajo, aunque no lo creas.

Y sin entrar en cuestiones políticas, resumiría el asunto en lo siguiente. La posibilidad de acercar Pozoblanco a una ciudad contemporánea o por el contrario, insistir en la problemática de la ciudad antigua. Hay que ser valiente y audaz para plantear la posibilidad de mejorar una ciudad. Porque como sabes, la construcción de la ciudad no es un proceso que se haga desde la autocomplacencia.

Un saludo.

Juan B. Carpio dijo...

Para que me incline por tirar la plaza me tienen que demostrar la falta de interés histórico del edificio. Que en principio yo opine que se debe mantener la protección no significa que un estudio serio no pueda convencerme. De ahí que diga que no me pronuncio. Porque no he estudiado con la profundidad suficiente este tema. Y no me pronuncio aunque en la barra del bar todo el mundo es perito en catalogaciones históricas, al parecer. He pedido varias veces seriedad, y no la veo en el falso y dirigido debate ni en tu postura. Igual que un arquitecto presenta un informe y lo factura, necesito ver que otros profesionales (historiadores, urbanistas...) redacten sus informes, los firmen y los cobren. Lo demás, chascarrillos de taberna sin valor alguno.

¿Sesgo político? Vamos a ver si me explico: político he sido toda mi vida. Aunque nunca he vivido de la política (que no es malo cobrar por trabajar para el bien público, pero yo siempre he mantenido mi trabajo, y no he tenido sueldo por actividad política). Es decir, nunca "me he dedicado a ello" si te refieres a dedicación profesional; pero siempre "me he dedicado" y me dedicaré si puedo, a intentar mejorar la sociedad, en la parte que me toque. Quiero seguir siendo político, eso te lo aseguro.

Juan B. Carpio dijo...

Y cuando defiendo que algo tendrán que decir historiadores y gestores de Patrimonio Histórico en la valoración de un bien protegido, con todo mi respeto por ejemplo para arquitectos (el mismo que para los biólogos o neurocirujanos) estoy adoptando una postura claramente política. Que no significa partidista, por cierto. Así espero seguir. Siendo "político" activo. Y reconociendo que todos los días, en mútiples decisiones u opiniones, estoy "haciendo política".

Si a lo que te refieres es a que actúo de manera partidista, para perjudicar a quien ahora gobierna en Pozoblanco... Pues te equivocas bastante. Entre otras cosas porque lo que conozco es principalmente cultura. Y en cultura hay cosas que ahora se hacen con las que no estoy de acuerdo; además, como he pasado por ahí, me doy cuenta de algunos fallos, de errores (porque yo los he cometido similares, o porque me he librado de ellos por los pelos...). O sea, que tengo conocimiento como para "hacer sangre". Como otros hicieron conmigo, y ahora callan. Pero mi valoración general de la gestión de la concejalía de cultura es positiva. Y como también sé el trabajo que tiene conseguir que algo salga bien... pues unas veces me callo, y otras intento animar, aplaudo. A pesar de mi queja por liquidar la oficina de Patrimonio Histórico, que es algo, por otra parte, en el que hay muchos órganos del ayuntamiento implicados y no sólo la conejalía de cultura. O sea, que poquitas críticas me has podido oir, y quizá alguna vez sí hayas podido oirme defender los proyectos (también las novedades) de la concejalía de cultura durante este último año.

Lo que me sorprende es que porque yo diga que los historiadores tenemos voz (y pretendemos comer tres veces al día, por cierto), me acuses de politizar. Mientra tú defiendes "la verdad absoluta", por supuesto.

Yo tengo un interés profesional en lo que digo. Como tú no te identificas ni siquiera, no sé si tu interés es político-partidista, profesional, personal... No tengo ni idea. Y como no sé quien eres, tampoco tengo claro si algo de lo que digo puede molestarte, o parecerte ataque personal... Son los problemas del anonimato.

Lo que sí sé es que ampararse en "el pogreso" es un absurdo. Es lo que decían desde mitad del siglo Xix con las estaciones de ferrocarril, por ejemplo. El tren trae "el pogreso". Nadie tiró en Pozoblanco bellas casas de fachadas de granito. Lo que tiraron todos fueron casas viejas, para sustituirlas por otras más nuevas y mucho más bonitas. Y eso es lo que me propones con la plaza. También eran valientes y audaces quienes derribaban las casas de los abuelos. Y ahí sí que he visto yo autocomplacencia. Porque en la conservación del Patrimonio Histórico de Pozoblanco, poca autocomplacencia se puede ver.

Termino con una pregunta: ¿quiénes deben ser los técnicos competentes para hacer un análisis de los valores históricos de un bien protegido? La pregunta es clara. Y mi posición también: es una posición corporativa. Porque yo no comeré de esos informes, pero tengo colegas que sí podrían hacerlo. Y estoy harto de que siempre "informen" los mismos, no siempre con competencia (no siempre con conocimientos) para hacerlo. Ya ves, soy corporativo y político. Si el sesgo es decir que falta informe de un historiador para definir los valores históricos del edificio, a partir de ahora seré "El Sesgao". Así, con mayúsculas.

Anónimo dijo...


Siento haberte molestado con algún comentario. No era mi pretensión. Y no entro en más cuestiones políticas, porque francamente, no me importan. Sin embargo, me molesta sobremanera que en el debate sobre la conveniencia de una u otra opción, nos vayamos por las ramas y no nos centremos en lo importante: la procedencia o no de construir una gran plaza en el centro del pueblo en lugar de conservar un edificio catalogado.

Estoy de acuerdo contigo en el planteamiento erróneo de la encuesta y en su aparente falta de rigor. Sin embargo, eso no quiere decir que todo el procedimiento sea fallido. Tenemos que ser capaces de ver las ventajas o posibilidades que ofrece cada una de las opciones, más allá de sensiblerías o simplificaciones monetarias.

Obviamente no es una decisión fácil y es necesario que profesionales del ramo (historiadores, arquitectos, empresarios, urbanistas...) se expresen públicamente al respecto. Y si no lo han hecho hasta el momento, tendrán sus motivos. Sin embargo, tampoco quiere decir que no se les haya consultado o se hayan expuesto argumentos rigurosos al respecto. Y puedes estar tranquilo, que no ha sido en la barra de un bar.

En relación a la pregunta que planteas, yo también creo en la necesidad de que un informe valore el peso histórico del edificio. Pero también tengo claro, que en una construcción de este tipo, dónde su génesis responde a la solución de unas necesidades concretas de tipo funcional, urbano y económico, no podemos justificar una actuación atendiendo exclusivamente al valor patrimonial. La cuestión patrimonial es importante, pero no puede pesar más que la cuestión urbana o económica. Porque si así fuera, no solo estaríamos contrariando los motivos principales que originaron el edificio. También estaríamos negando las condiciones del presente, donde la degradación urbana y la penuria económica lamentablemente marcan el día a día del edificio y de su entorno.

No es ampararse en el progreso, se trata de ser consciente de las dificultades de la situación actual. Porque de igual manera que es importante el conocimiento de la historia, también lo es el conocimiento del presente. ¿Que pesa más? Yo al menos tengo que en este caso pesa más el presente. Y eso no es un alegato contra tu profesión, todo lo contrario. Es fundamental conocer el pasado, porque nos ayuda a tomar mejores decisiones. Pero de ahí a poner por delante la conservación frente a la actualización que exigen las circunstancias actuales, hay un largo camino.

Saludos.


Juan B. Carpio dijo...

Ya ves que soy un coñazo escribiendo textos largos y largos... Pasaré mis opiniones a una nueva entrada, pero te contesto antes alguna cosilla.

1. "Política": decidir qué debemos hacer con la Plaza o con el espacio que ocupa es, directamente, política. Yo hago política. Tú haces política. Otra cosa es defender a grupos políticos concretos. Tú has cargado contra el PSOE, sabiendo dónde estoy yo, y yo no he criticado a ningún grupo, sino directamente una decisión. Por cierto, quizá esta "necesidad" del anonimato no sea una idea tan brillante. Porque desde el anonimato criticas unas opciones que yo hago públicas con mi nombre... mientras yo no puedo responderte. Quizá estos ataques a los que alguna vez hemos ocupado cargos públicos tengan también mucho que ver en que mucha gente no acepte presentarse a las elecciones. Quizá tendríamos que pensar si realmente la "presión social" que recibimos quienes firmamos con nuestro nombre, quienes en un momento dado hemos dado un paso al frente para intentar representar a nuestros vecinos no nos viene siempre de los "anónimos"... En fin, es una reflexión que dejo aquí.

2. "Lo importante". Para tí lo importante es hacer o no hacer una plaza. Para mí, el fin no puede nunca justificar los medios. Y los medios son estos: banalización completa del Patrimonio Histórico y desprecio absoluto por los profesionales que se dedican a esto. Independientemente de que no tenga claro que abrir una plaza sea lo mejor, te repito que el fin no justifica los medios. Para mí, no. Y el procedimiento legal no podemos saltárnoslo. Y para quitar una protección que el edificio tiene tengo entendido que hay que iniciar un procedimiento que conlleva los mismos requisitos exigidos en su día para iniciarlo. Nuestro Ayuntamiento inicia el proceso previo con una consulta popular, sin requerir informes (firmados y facturados, te lo vuelvo a repetir) de profesionales solventes. Mal empezamos un proceso que, de seguirse, durará tiempo. Es decir, varios años. Por eso dije antes que no se hará obra alguna en esta legislatura. Si es por eso por lo que me acusabas de "político" creo que te equivocabas. Eso sí, siempre podrá alguien justificar la inactividad en esta obra alegando a que los informes de Ordenación del Territorio, de la Comisión de Patrimonio o de cuantos órganos tengan que informar es la culpable de que no tengamos esa gran plaza que garantiza el futuro de Pozoblanco.